Imagen: redes sociales

Selección: Márcia Batista Ramos

“La poesía es el sentimiento que le sobra al corazón y te sale por la mano.”

Carmen Conde

Tanussi Cardoso es brasileño, nacido el año 1946. Formado en periodismo (PUC/RJ) y derecho (Bennet), licenciado en inglés (BBC). Poeta, cuentista, crítico literario y escribe letras de canciones. Además de ser activo colaborador de diversas publicaciones literarias en Brasil. Ha editado los libros Desintegración (1979); Boca maldita (1982), Viaje en torno de (2000); La medida del desierto y otros poemas (2003). Tiene poemas publicados en Argentina, Chile, Colombia, Estados Unidos, Italia, Portugal, y Uruguay, y ha sido traducido al francés, español e italiano. Es columnista del periódico carioca RIO LETRAS. Es miembro de la asociación de poetas del Estado de Río de Janeiro (APPERJ) y presidente del sindicato de los escritores del Estado de Río de Janeiro (SEERJ). El año 2006, representó a Brasil en el Segundo Festival Latino-Americano de Poesía “Ser al fin una palabra”, realizado en México, Distrito Federal, invitado por los poetas mexicanos Federico Corral Vallejo y Angélica García Santa Olaya entre otros.

 

CÁNTICO PARA GUIMARÃES ROSA

I

con los ojos de la poesía,

que contienen el verbo del hombre y el amanecer,

repartir el desierto de las noches sin boca,

la sombra de la muerte y el miedo.

agua que nada en soledades.

(¡vivir es muy peligroso, Dios mío!)

porque el sertón es del tamaño del mundo,

(la medida del hombre y su abrazo),

en él, el mañana es un susto.

porque la palabra fuese el motor de la vida misma,

reinventar el rumbo de los peces,

reescribir el fundamento de la sintaxis.

porque todo se moviese ―lírica labranza―

en el yacimiento de oro y plata del lenguaje,

sumergirse en el río y de él extraer la palabra.

palabra que corra veloz como el agua.

más veloz que la misma expresiórosa que florezca en el suelo duro.

II

que se abra en el sertón

el dolor que no tiene nombre

: la garganta / la garra / la agalla /

la bocael dolor que sólo tiene el nombre del hambre del hombre

que se abra en el sertón

la luz del ombligo

: la selva / la daga / la azada / la cruz

el fusil / el sótano / el pan

que habitan el hombre que tiene la flor dentro del nombre

que se abra en el sertón

el sueño que trabaja el destino

: río / pez / arroyos /sol

sombra / mañanas / flor

nombres que nacen del hambre de la lucha del hombre

(que se abra en nosotros el aroma de la rosa

que se llama hombre.)

III

cosechar la palabra donde ella pueda ser simiente.

sembrarla para que su fruto

tenga aroma de bosque y pasto.

cosechar la palabra

para que sea poesía en los oídos.

cántico que resuene en las tribus más distantes.

zurcir la palabra en la piel del hombre

para que sol y lluvia

tengan el peso de la igualdad.

en el sertón, ¿dónde la palabra justa?

en el sertón, ¿dónde tejerla?

dime, Rosa, ¿en qué sangre brotará la palabra paz,

si es en sangre que la palabra vibra y se hace?

* * *

Manuela Vicente Fernández, española, colabora con sus relatos en proyectos humanitarios y libros solidarios para distintos colectivos. Sus relatos y poemas figuran en varias publicaciones y revistas nacionales e internacionales, en digital o en papel, como Valencia Escribe, El Callejón de las Once Esquinas (Zaragoza) el boletín literario Papenfuss, el periódico La voz de Galicia (sección Relatos de Verán) o la publicación Luzes (Coruña). En Argentina ha sido publicada en la revista Extrañas Noches-Literatura Visceral. Ha colaborado con varios cuentos en el Proyecto Sherezade (Universidad de Manitoba-Canadá), publicación on line que nace con el fin de enseñar la lengua castellana a través del cuento y reúne cuentos de habla hispana de todo el mundo. En la web puede verse parte de su obra en páginas literarias como Piedra y Nido, Cita en la Glorieta, ENTC, Literatura 5.0, o la Asociación de escritores Cinco Palabras entre otras.

En narrativa ha obtenido diversos premios y menciones en numerosos concursos literarios de relato breve y microrrelato siendo sus obras seleccionadas en más de una veintena de antologías y libros colectivos.

Formó parte en su día del equipo de redacción de la revista Moon Magazine con la que colaboró escribiendo reseñas literarias, labor que realizó también en la revista Galeradas y realiza actualmente en la revista Culturamas. Mantiene activa su bitácora personal: Las cosas que escribo (WordPress).

ETERNIDADES

 

De amanecer se me llenan las manos

haciendo aguas entre los dedos.

Una canción que siempre me acompaña.

Una tarde larga y doliente como el último trino

del penúltimo pájaro.

El dolor es un sueño que se astilla,

ala rota en el cielo zozobrando.

De ausencia se me secan las cuencas de los ojos

buscando otras miradas.

Pero aún tu calor es mi refugio,

como del fuego el ascua,

aún mantengo en mis manos el instante.

Abrázame despacio, dice el día,

polvo de mariposa, cuesta abajo.

De amanecer se me llenan las plantas del balcón,

agrietadas de escarcha.

Abrázame despacio, dice el niño,

que crece mientras duerme abriendo brazos

al devenir del ciclo de estaciones,

al leño en la cocina,

a los maullidos de los gatos del barrio.

De amaneceres se hacen nuestras vidas

hasta quedarse en blanco.

Abrázame despacio, dice el vientre

de la mujer en cinta, atesorando,

sus recuerdos de niña en la memoria

cada vez más exigua de su madre.

Abrázame despacio, dicen todos

los heridos amantes,

no sea que mi costado cruja, roto,

como una cuerda suelta de guitarra.

***

JOSÉ LISSIDINI SÁNCHEZ – 17/04/1961. Montevideo. Uruguay. Escritor. Poeta. Prologuista. Periodista. Político. Activista Social. Profesional Universitario en Derecho (Procurador). Publicaciones: “Destetiempo”, Poemas. Uruguay (1990); “Días de Tormentas”, España; Perú; Argentina (2019); “El Jardín de los Abrazos”, España (2019); “Menudos Corazones”, España (2020).

 

-De izquierda a Derecha-

Despierten los que duermen,

arrullados por el canto hipnótico

de la Sirena de la falsedad y el fraude.

Descubran a los Sicarios infanticidas

que liban en todas partes, a los que diseminan

mentiras, agitación y razones para el odio,

a las máquinas de desmoralizar, a los criminales

casi “Héroes” mundiales, que corroen

corazones, siembran la sospecha, el resentimiento,

  y extirpan el amor fraternal.

Vean a los Repudiables energúmenos,

 “Polillas” sociales engendrando frustración,

divisiones y fracturas,

enfundados en la piel de los que sufren.

Observen a los Terroristas dinamitadores

de Paz y de Vida, que entremezclados

se hamacan de derecha a izquierda

engañando a los pueblos,

llevándolos a prescindir de la noción,

de la delgada línea entre la verdad y la fantasía,

mientras de izquierda a derecha,

impelidos por comunes ambiciones

y espurios intereses, esos decadentes guionistas,

artistas, directores y extras Hollywoodenses

de la Política Internacional, roen los resecos

restos óseos de la Esperanza, la Equidad,

la Honestidad, la Decencia, la Justicia y la Libertad.

Despierten y descubran, viendo

de derecha a izquierda, y de siniestra

a diestra, que esa caterva de violadores

de ilusiones, de desvergonzados genocidas

y nosotros, no somos la misma cosa.

DEL LIBRO “DÍAS DE TORMENTAS 2”

       ***

YURIMIA BOSCÁN. Caracas 1963. Poeta. Lic. en Letras con una maestría en Tecnología Educativa. Profesora universitaria (jubilada) en el área de Literatura… Entiende a la poesía como esencia que contiene al ser. Cantora y soñadora, fiel creyente en los mundos posibles para el encuentro, el amor y la justicia. Su trajinar por la palabra ha sido reconocido con algunos premios, como el Premio Municipal de Literatura Cecilio Acosta, y el Premio de Poesía Ana Enriqueta Terán, entre otros. Para alimentar su cuerpo y su espíritu, asesora a quienes buscan la palabra como camino de vida, corrige textos, escribe prólogos, da talleres, hace guiones y canta boleros…

1

Para ella

fue la fiesta

el argumento para el arrebato

Para él

lo inalcanzable

lo que se tiene

y no se tiene…

el anhelo

Piedra, papel o tijera

–le dijo–

Y ella lo cortó…

2

Si yo fuera este mar

azularía tus ojos

lamería tus pies

me enredaría en tus muslos

abriría para ti

todas las ostras…

Pero no soy este mar

ni su oleaje

Breve pisada

en mar de leva

sin sal

sin arrecifes

 ¡Ay, amor!

si yo fuera este mar

si yo fuera…